Las fotos de los bosques desolados, los campesinos hambrientos, los glaciares en deshielo permanente, la naturaleza depredada, martillan la conciencia de los que sabemos que no hay otro planeta donde vivir.
Es el efecto del capitalismo, acelerado en la neoliberalidad del capital financiero, con consecuencias como el enorme derrame de petróleo de la plataforma extractora de la empresa norteamericana BP (antigua British Petroleum) por violar las medidas de seguridad y echar a andar la (...)